Mantener las encías sanas, nos ayuda a mantener sano el corazón. Es la conclusión a la que podemos llegar si leemos numerosos estudios que relacionan la buena salud bucodental con la mejoría en las arterias carótidas, y por ende en el corazón.
La aterosclerosis es una enfermedad que afecta a las arterias, produciéndose por un endurecimiento de las mismas provocado por un exceso de grasa y otras sustancias en forma de placa, pudiendo bloquear de manera total o parcial el paso de la sangre.
Cuidar de la boca podría tener consecuencias en nuestra salud vascular, pues las infecciones en las encías son prevenibles y tratables.
A medida que la salud de las encías mejora, la acumulación de placa en las arterias se hace más lenta y se frena el avance de la aterosclerosis. Por lo tanto, cuidar nuestra boca puede tener un gran impacto en nuestro corazón, pues como decíamos, tener una buena salud en las encías disminuye el riesgo de acumular placa en las carótidas (arterias del cuello).
Las personas con un nivel más elevado de la bacteria que causa la enfermedad periodontal muestran un mayor grosor en las arterias carótidas. Esto se presenta como un factor muy preocupante y de riesgo, puesto que la aterosclerosis puede derivar en ataques en el corazón o ictus.
Para tener una buena higiene bucal y unas encías sanas debemos seguir estos consejos:
- Cepillarse los dientes con una pasta con fluoruro, al menos 3 veces al día.
- Dedicarle por lo menos 3 minutos al cepillado.
- Cambiar el cepillo de dientes cada 3 meses.
- Usar hilo dental al menos una vez al día.
- Visitar al dentista cada 6 meses para una limpieza y revisión.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que la salud bucal debe incorporarse en las políticas de prevención de enfermedades crónicas no transmisibles. Para cualquier tipo de duda o consulta, puedes contactar con nosotros en Centros de Calidad Dental.