La ortodoncia es uno de los tratamientos bucodentales más conocidos. Sirve para corregir la oclusión y alineación de los dientes, logrando una sonrisa bonita y saludable. Pero ¿sabías que después de llevar aparato es crucial utilizar los retenedores? ¡Descubre en este post cuáles son los motivos por los que hay que llevarlos!
Estabilización de los resultados
Una vez ha finalizado el tratamiento de ortodoncia debes saber que los dientes necesitan tiempo para adaptarse y estabilizarse en su nueva posición. Precisamente los retenedores desempeñan un papel fundamental en este proceso a la hora de proporcionar estabilidad y evitar que los dientes se muevan nuevamente. Ayudan a mantener cada una de las piezas dentales en su lugar, evitando posibles desplazamientos y asegurando los resultados a largo plazo.
Prevención de recidivas
El movimiento de los dientes es un problema bastante frecuente después de la ortodoncia si no se lleva a cabo la fase de retención. Seguro que has escuchado muchas veces la siguiente frase: los dientes se me han vuelto a mover. Esto se debe a que los dientes no están sujetos directamente pegados al hueso, sino que los une un ligamento que tiene cierta memoria y tiende a devolverlos al sitio de donde partieron antes del tratamiento, por otro lado, existen fuerzas constantes en la boca que hacen que los dientes siempre se desplacen hacia el centro y hacia abajo, en el caso de los de arriba, o hacia arriba, en el caso de los de abajo; para neutralizar todas estas fuerzas naturales debemos usar los retenedores.
Una inversión a largo plazo
La ortodoncia representa una gran ventaja para la salud bucodental. Corrige, no solo problemas estéticos, sino también funcionales, mejorando la masticación y previniendo el desarrollo de enfermedades como las caries o la gingivitis. Por todo ello, se trata de una gran inversión, tanto de tiempo como económica. De ahí la importancia de mantener los resultados a largo plazo mediante el uso de retenedores. Si no los llevas, podría conllevar la necesidad de realizar otro tratamiento ortodóntico, implicando más tiempo y dinero.
Mejora de la salud oral
Otro de los beneficios de la fase de retención es que favorece la salud bucodental. Al mantener los dientes en su posición correcta, los retenedores facilitan la higiene oral diaria, tanto el cepillado como el uso de la seda dental. Ten en cuenta que los dientes correctamente alineados son más fáciles de limpiar, lo cual ayuda a prevenir la acumulación de placa bacteriana y, por ende, la aparición de enfermedades periodontales. Además, tener una mordida adecuada reduce la probabilidad de desgastes dentales y alteraciones en la articulación temporomandibular.
Diferentes tipos de retenedores
Existen diferentes tipos de retenedores y será tu ortodoncista quien determine cuál es el más adecuado para ti. Principalmente hay dos tipos: removibles y fijos. Los primeros están hechos a medida en un material termoplástico y en general se usan solamente por las noches. Por su parte, los segundos consisten en unos finísimos alambres que se cementan por la cara interna de los dientes, por lo que no se notan y son muy cómodos.
En cualquier caso, si quieres conocer más detalles sobre la retención, en Centro de Calidad Dental contamos con una especialista en ortodoncia que te indicará todo lo que necesitas saber sobre cada una de las fases de tu tratamiento correctivo.
No olvides que, si estás buscando una clínica dental en Santa Cruz de Tenerife, puedes venir a visitarnos o contactar con nosotros siempre que lo desees. Estaremos encantados de cuidar de tu salud bucodental.
¡Te esperamos!
