La curva de Stephan y el PH de los dientes

En 1944 el doctor Stephan demostró en un experimento que justo después de comer, el Ph de la boca desciende durante cinco minutos hasta los 5.5 puntos, la representación gráfica de este resultado es lo que se conoce como «La curva de Stephan»

Es un momento crítico. Por debajo de este límite se produce una desmineralización que daña el esmalte de los dientes. Sin embargo, gracias a la acción de la saliva el Ph vuelve a sus niveles de equilibrio entre 20 y 40 minutos más tarde. Este vaivén del Ph se conoce como curva de Stephan y saber en qué consiste es importante para evitar las caries. El azúcar es el agente principal que provoca la acidez del Ph, así que, en la medida de lo posible, es conveniente reducir su consumo.

La curva de Stephan demuestra que el azúcar es el principal causante de problemas en la boca porque las bacterias que se acumulan motivan el descenso del Ph

Ahondemos más en este asunto: las bacterias que permanecen en la boca tras ingerir cualquier alimento provocan el descenso brusco del Ph, por lo que se produce una desmineralización de la superficie dental. Aquí entra en juego la capacidad protectora de la saliva, que «barre» las bacterias y logra devolver a la boca a su Ph natural de 7 puntos. Es importante que se encuentre aquí y no por debajo de 5, momento en el que se favorece la acción de la temida caries dental.

Aunque parezca una cuestión obvia, el nivel de acidez del organismo es crucial para una buena salud. Un cuerpo ácido es un cuerpo insano, así que hay que intentar mantener un grado de Ph en sangre alcalino, que ronde el 7.4.

Por suerte, hay muchas formas de conseguirlo: comer frutas y verduras frescas, evitar el azúcar refinada, beber agua purificada o de manantial y usar productos de limpieza domésticos, entre otras cosas. También está demostrado que el ejercicio físico y un buen equilibrio emocional favorecen la alcalinidad del cuerpo y que la curva de Stephan no sea demasiado abrupta.

¿Por qué aparecen las caries?

Las caries son un grave problema de salud bucodental y uno de los más frecuentes, de hecho según la OMS es la tercera enfermedad más extendida en el mundo. Se trata de una infección causada por la acción de las bacterias, que se encuentran en la boca y destruyen el esmalte de los dientes.

Las bacterias producen un ácido que se sitúa en la superficie de los dientes donde comienza la destrucción del tejido hasta producir una perforación del diente y llegar a la pulpa del mismo.

El primer signo que alertará de la presencia de una caries es la inflamación de las encías.

Cómo prevenir las caries

El mejor método preventivo es una buena higiene de la boca, es decir, cepillar los dientes al menos tres veces al día. Además, se recomienda:

• Utilizar hilo dental
• Utilizar enjuague bucal
• No abusar de azúcar
• Seguir una dieta equilibrada
• Realizar revisiones periódicas en el dentista
• Realizar anualmente una limpieza dental profesional