Nuestra boca está expuesta a muchos problemas si no la cuidamos bien en el día a día. Una de las partes más vulnerables es la encía, que se puede ver afectada por enfermedades como la gingivitis o la periodontitis.
Podríamos considerar la gingivitis como un paso previo a la periodontitis, una enfermedad más seria y que conlleva una mayor gravedad afectando a los dientes de tal manera que podrían incluso moverse y caerse, de ahí la importancia de conocer la gingivitis para poder diagnosticarla y tratarla a tiempo.
La gingivitis se produce por la acumulación de placa en la unión entre el diente y la encía, ya que esta es atacada por las bacterias provocando inflamación
Esta enfermedad no muestra dolores en un primer momento y consiste en una inflación del tejido que rodea el diente producida por la presencia de bacterias. Podemos saber que tenemos gingivitis porque las encías se muestran inflamadas y enrojecidas y esto lleva a que se produzca sangrado durante el cepillado, lo que podríamos considerar como el primer síntoma de la enfermedad.
La gingivitis avanza si no se ataja a tiempo. En un principio, el enrojecimiento de las encías pasa desapercibido aunque pueden sangrar ligeramente durante el cepillado.
Si sigue avanzando, el enrojecimiento de las encías se hace patente y aparece la hinchazón y el sangrado durante el cepillado se hace más relevante.
Cuando se convierte en grave, la encía empieza a separarse de la superficie del diente y crece el espacio entre la encía y el diente, y el sangrado se vuelve espontáneo.
En Centros de Calidad Dental te ayudamos a cuidar de la salud de tu boca, previniendo, diagnosticando y tratando las enfermedades de las encías y de los tejidos de soporte del diente para que no se produzca inflamación gingival, sangrado al cepillar, ni mal aliento de boca y por supuesto, para no tener que llegar a la extracción de ninguna pieza dental.